Estamos a mediados de diciembre y este es el momento perfecto para adentrarnos en la práctica del balance personal. Es un ejercicio que realizo cada año en esta temporada, un ritual de sanación holística que me conecta con mi interior y me prepara para recibir el nuevo año con renovada energía y conciencia.
El final de un año es el momento perfecto para reflexionar sobre nuestros logros, desafíos superados y el crecimiento personal experimentado. Aprovechemos este instante para mirar hacia atrás con gratitud y hacia adelante con entusiasmo. Aquí tienes algunas preguntas de reflexión tipo journal para ayudarte en este proceso de balance de fin de año y para prepararte para un nuevo comienzo lleno de posibilidades.
1. Haz Memoria:
El primer paso en tu proceso de sanación holística es recordar y reflexionar sobre lo que has vivido durante el año. Piensa en tus logros, aprendizajes y cambios. Observa cómo has evolucionado desde el punto de partida hasta donde te encuentras ahora. Celebra cada uno de tus pasos, grandes o pequeños. Haz una lista de tus logros y descubrirás que has avanzado más de lo que imaginabas. Pregúntate:
- ¿Qué momentos se habían "olvidado" y han vuelto a la memoria mientras hacías la lista?
- ¿Cuáles han sido tus momentos más felices y tus mayores desafíos?
- ¿Qué has aprendido sobre ti mismo en esas situaciones difíciles?
- ¿Cuál ha sido tu mayor logro, ya sea personal o profesional?
- ¿Qué cualidades has descubierto en ti para lograrlo?
- ¿Qué te ha sorprendido de ti mismo?
- ¿Qué nuevas lecciones has aprendido este año?
- ¿Has conocido a personas importantes para ti en este año?
- ¿Qué aspectos de tu vida en 2023 deseas mantener?
- ¿Qué quieres agradecer?
- ¿Qué necesitas soltar?
- ¿Qué estás dispuesto(a) a cambiar?
- ¿Qué te gustaría transformar?
- ¿Qué estás dispuesto(a) a recibir?
2. Agradece:
La gratitud es una poderosa herramienta de sanación holística. Recuerda dar gracias por todo lo que has recibido y por lo bueno que está por venir. Despedir el año con gratitud te permitirá dar la bienvenida al nuevo año con el corazón abierto. Pregúntate:
¿Por qué estás agradecido(a) hoy?
¿Qué acontecimientos de los últimos meses merecen tu gratitud?
¿Qué experiencias de todo el año te inspiran a dar gracias?
Considera crear un "frasco de gratitud" para recordar y valorar lo positivo.
Qué lecciones has aprendido de los desafíos que enfrentaste y cómo te han ayudado a crecer?
¿Cuáles son tus valores fundamentales y cómo los has incorporado en tus decisiones y acciones a lo largo del año?
3.Metas y logros
¿Lograste cumplir con las metas que te propusiste a principios de año? ¿Por qué sí o por qué no?
¿Cómo puedes ajustar tus metas para el próximo año de manera que reflejen tu crecimiento y aspiraciones actuales?
Cómo han evolucionado tus relaciones personales este año? ¿Hay relaciones que necesitas fortalecer o cultivar más?
4. Suelta:
A medida que nos acercamos al cierre de un año, es imperativo tomarnos un momento para reflexionar sobre lo que debemos dejar atrás. Soltar el año viejo no solo implica dejar ir experiencias y situaciones, sino también liberar emociones que ya no nos sirven. Es como limpiar el armario de nuestra mente y corazón para hacer espacio para nuevas alegrías, logros y aprendizajes. Al soltar lo antiguo, creamos espacio para el crecimiento personal y nuevas oportunidades que el próximo año nos tiene reservadas.
Preguntas para Soltar el Año Viejo:
¿Qué situaciones o relaciones te han causado más estrés o angustia este año y es hora de liberarlas?
¿Cuáles son las expectativas no cumplidas que estás llevando contigo y que te impiden avanzar?
¿Qué patrones de pensamiento negativos te gustaría dejar atrás para empezar el nuevo año con una mentalidad más positiva?
4. Transforma:
¿Qué miedos o inseguridades has arrastrado durante este año?
¿Hay rencores o resentimientos hacia otras personas que te están impidiendo vivir plenamente? ¿Cómo puedes dejar ir esas emociones?
¿Cuáles son las críticas o juicios que te haces a ti mismo y que ya no te sirven?
¿Cómo te gustaría sentirte en el próximo año y qué emociones debes dejar ir para permitir ese cambio?
Este proceso de reflexión te permitirá soltar el lastre del año viejo y embarcarte en el nuevo año con una sensación renovada de ligereza y posibilidad.
5. Abriéndote Emocional y Energéticamente para Recibir la Abundancia:
Abrirse emocional y energéticamente es como desplegar las velas de un barco en un mar de oportunidades. Al permitir que tus emociones fluyan y tu energía se expanda, estás creando un espacio propicio para recibir las bendiciones que el universo tiene reservadas para ti. Visualiza tu vida llena de logros, amor y prosperidad, y permite que esa visión te guíe hacia la manifestación de tus sueños. Al trabajar en tu relación con el dinero y la abundancia, no solo estás abriendo las puertas a la prosperidad financiera, sino también a una vida plena en todos los aspectos.
Práctica de Gratitud Diaria: Lleva un diario de gratitud para reconocer las abundancias presentes en tu vida, desde las pequeñas alegrías hasta los logros significativos.
Visualización Creativa: Dedica tiempo diario para visualizar tus metas, imagina los detalles y siente la emoción de haberlas logrado. Esta práctica alinea tu energía con lo que deseas atraer.
Afirma tu Abundancia: Crea afirmaciones positivas que refuercen la idea de que mereces recibir abundancia en todas sus formas. Repítelas con convicción para programar tu mente y energía hacia la prosperidad.
¿Cuáles son tus verdaderos deseos y metas para el próximo año, y cómo puedo alinear mi energía con ellos?
¿Qué prácticas de autocuidado y bienestar puedo incorporar para elevar mi energía y vibración personal?
Al abrirte emocional y energéticamente, te conectas con la esencia misma de la abundancia. La gratitud, la visualización positiva y la afirmación de tu valía para recibir crean un flujo energético que atrae más de lo que deseas. Recuerda que la abundancia no se limita al aspecto financiero; también incluye amor, bienestar y éxito en todas las áreas de tu vida. Al sintonizarte con la abundancia, te conviertes en un imán para las oportunidades que te permitirán vivir la vida que sueñas. ¡Prepárate para recibir todo lo bueno que el universo tiene reservado para ti!
6. Proyecta y Actúa:
Con la determinación palpable en el aire, es el momento perfecto para trazar un plan de acción personal que te guíe hacia el cambio auténtico que buscas en tu vida. Comienza por identificar claramente tus metas y objetivos, desglosándolos en pasos alcanzables y realistas. Visualiza el camino que te llevará a tu versión más vibrante y plena.
Comprométete contigo mismo a dar pasos consistentes, incluso cuando el camino se vuelva desafiante.
¿Qué acciones específicas puedes tomar para alinear tu día a día con tus aspiraciones más profundas?
Haz de la acción una compañera constante en tu viaje hacia el cambio significativo. No permitas que las oportunidades pasen desapercibidas; más bien, créalas con cada elección consciente.
¿Estás listo para dedicar tiempo y esfuerzo a tu balance personal de fin de año? Este plan de acción no solo es un compromiso contigo mismo, sino también un regalo que te brindas para transformar tu vida de una manera que resuene con tu auténtico ser. ¡Adelante, da el primer paso hacia tu mejor versión!
Si sientes que necesitas comenzar tu proceso de sanación, cierre y soltar, no dudes en ponerte en contacto. Estoy aquí para apoyarte en tu viaje hacia una vida más plena y consciente.
Gracias por leer y compartir. ¡Te deseo una Feliz Navidad y un Amoroso Nuevo Año lleno de crecimiento y bienestar!
Con amor,
Alejandra León,
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