Escuchar la voz interior
En muchos momentos de nuestra vida, en el día a día vamos por el mundo preguntando qué debo hacer, cómo debo actuar, hago esto o hago o aquello; incluso, pedimos consejo a amigos, preguntamos a los más cercanos y buscamos que otros nos den respuesta quitándonos el poder de escuchar nuestra voz interior. Incluso hacemos caso y actuamos o tomamos nuestras decisiones en función de lo que los demás nos han dicho, sin que necesariamente ello sea lo que resuene en nuestro interior.
Este modo de actuar y vivir, tiene duras consecuencias, ya que estamos actuando en contra de nuestro instinto, de nuestro ser, y nuestros verdaderos deseos y, por tanto, la mayor parte del tiempo nos sentiremos como si estuviéramos en el lugar equivocado.
Supongo que a todos nos ha pasado, y la típica r reacción es hacer como que nada pasa, como que todo va bien, pero con el tiempo, el alma va pidiendo su espacio y su lugar, la fuerza interna ira gritando “este no es mi sitio” y empieza el malestar interior a tomar fuerza. Justo allí es cuando la queja, el reclamo y la incomodidad se apoderan de la persona, de su lenguaje y su ser.
La invitación entonces, es a dejarnos sentir, escuchar la voz interior, sin necesidad de seguir una pauta, un guion. Seguro que al inicio no “sabrás” que es lo que pasas, pues esa voz interior necesita recobrar su lugar, su fuerza, y ser escuchada. Se trata se silenciar la mente, abrir las puertas del alma y escuchar en el interior la respuesta, seguro que con la práctica sabrás claramente por dónde debes seguir, cuál es el camino que deberás tomar en cada momento; pero sobre todo, sabrás que lo que hagas lo que hagas estarás actuando en concordancia con el amor profundo de los más interno de tu ser.
Y así en vez de ir a contra corriente, iras fluyendo, de modo tal, que el viaje de tu vida será más ligero y podrás disfrutarlo de otro modo.
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