La demanda de cumplir con todo: una reflexión después de una sesión de sanación holística
En este preciso momento, nos encontramos en un territorio que se aparta de lo que consideramos normal y cotidiano. No estábamos preparados para afrontar esta situación; nadie nos advirtió que este sería nuestro escenario.
Es posible que sientas la expectativa de abarcarlo todo, de dar el máximo en todas las áreas de tu vida: hogar, trabajo, hijos, pareja y más. Sin embargo, quiero recordarte que este no es un escenario "NORMAL". Permítete reducir la exigencia, ajustar tus propias expectativas y decir en voz alta: "No puedo más". Está bien poner límites y, si es necesario, delegar responsabilidades.
Reducir tus expectativas y exigencias no implica defraudarte, aunque puedas sentirlo de esa manera. Más bien, significa aceptar con compasión que el momento que estamos viviendo difiere de lo habitual. Habrá cosas que escaparán de tus manos, momentos en los que te sentirás agotado, en los que querrás gritar, desesperarte e incluso arrojar todo lejos, a un lugar lejano.
Disminuir tus expectativas y exigencias contigo mismo es un acto de amor propio. Significa aceptar con cariño que hay elementos y situaciones que están fuera de tu control. Es soltar el afán de control y contentarte con hacer lo que puedas, sabiendo que eso es suficiente. No es necesario darte en cuerpo y alma al 150%, porque tarde o temprano eso pasará factura.
Así que te propongo una negociación contigo mismo: empieza a reducir la presión de llegar a todo, de enfrentar cada desafío, de abordar cada tarea. No es necesario ser el chico o la chica 10 en todas las áreas de tu vida.
Reflexiona sobre esto:
¿Cómo se encuentra tu expectativa de abarcarlo todo en medio de lo que estás viviendo?
¿Qué pacto contigo mismo necesitas redefinir?
¿Alguna vez has sentido que no puedes más?
¿Has sentido la necesidad de soltarlo todo?
¿Te has encontrado en una situación en la que tu vida parece un elástico estirado al límite?
Una de las personas que acompañé en una sesión de Sanación Holística llegó exhausta, expresando que no podía seguir adelante. Estaba enferma y sentía que su capacidad estaba agotada. Necesitaba detenerse. Recordé entonces un pasaje conmovedor del libro "El Lenguaje del Adiós" de Melody Beattie, que habla sobre la fortaleza y su significado en momentos como estos.
Te envío un abrazo y te deseo un día lleno de reflexiones y autocompasión.
Con amor,
Alejandra León,
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